Buscamos alojamiento económico, y encontramos un duplex (lo reservamos por Internet: enlace) por 60€ dos personas, 3 noches. Estaba muy bien situado, a 5 metros de la calle más céntrica de Budapest (Vaci Utca), así que era perfecto.
Salón-comedor del apartamento |
Llegada. Día 1:
El vuelo se retrasó debido al tiempo y el tráfico, pero aún así fue bastante tranquilo. Llegamos sobre las 5.10 de la tarde a nuestro destino: Budapest.
Una vez en el aeropuerto habíamos contratado desde Dinamarca el trayecto aeropuerto-hotel con DisfrutaBudapest por 25€ (por trayecto), así que cuando aterrizamos había un hombre con un cartelito esperándonos en el aeropuerto para llevarnos a nuestro destino. Por el camino nos fue explicando un poco sobre Buda y sobre Pest y su historia ¡y todo en español!.
Una vez que llegamos al apartamento nos recibió (un poco tarde), un muchacho muy joven, explicándonos las zonas más importantes a visitar, los supermercados cercanos, zonas de restaurantes, bares, etc. y nos lo fue indicando en un mapa que tenía preparado para nosotros.
Tras esto nos fuimos a cenar a la calle Raday, donde descubrimos una de las maravillas de Budapest: su gastronomía (¡y sus precios!). Cenamos en un restaurante llamado Püder, al que deberíamos considerar como "alternativo", pues es tanto teatro como restaurante y además esta decorado de una forma un tanto peculiar:
Lámpara colgante |
Planta baja del restaurante |
Aunque pueda parecer desastroso, el restaurante es así, es muy original y el servicio muy atento. ¡Y ni que decir de la comida!, nos llenamos hasta no poder más: Un entrante de sopa goulash, un primer plato cada uno: pollo empanado con una salsa de ajo y aguacate, y otro plato de una pasta (no se muy bien qué es pero algo así como gnocchi), con bacon y algo más que no llegamos a descubrir y dos bebidas cada uno. No podemos olvidar el postre: una tarta de lima y naranja para mí y un tiramisú para Fernando, más café y té. ¿Sabeis cuanto costó TODO?, ¡unos 20€!
No hay comentarios:
Publicar un comentario